Era finales de 2011 cuando aquel Fiat Grande Punto entró en el garaje de casa. Entonces tenía 19 años, llevaba unos meses con el carné de conducir y aquel pequeño me parecía el mejor lugar del mundo. Si no llega a ser por el frío, podría haberme quedado a dormir dentro aquella noche.
Empezó formando parte de toda la familia pero la intención era que, con el paso de los años y ganando en independencia, me hiciera yo cargo de él por completo. Poco a poco, se cumplieron etapas, dije adiós a la universidad, por el camino se entrelazaron los primeros trabajos hasta, llegado un día que ahora está más cerca de la década, asentarme como periodista.
Hace solo unos meses que lo vendí. Muy entrado 2023 dije adiós a aquel pequeño que tantas alegrías nos había dado a la familia pero también a mi pareja y amigos. Y, no lo voy a esconder, también unos cuantos disgustos.
Porque, aunque ahora recuerde con cariño sus tres puertas, reconozco que no lo vendí antes por esa extraña relación de amor-odio que sólo podemos sentir con un coche. Aquel Fiat GrandePunto nos sacó muchas sonrisas pero también nos dejó tirados de camino a Lisboa, sin motor de arranque a las 22:00 horas de un domingo en Extremadura con toda una vuelta a casa por delante o completamente asados de calor todo un viaje de verano.
No fue fácil decirle adiós y, ahora que ya he pasado el luto, he sacado la carpeta donde guardaba todas las facturas. Como quien desempolva un album de fotos. He soplado, le he quitado el polvo a la tapa del archivador, he cogido un excel y sumado.
Estas han sido las cifras resultantes de subirme a mi coche durante 11 años y nueve meses en los que recorrimos juntos un total de 134.000 kilómetros.
Saco la calculadora y me echo a temblar
Si echamos la vista atrás, 2011 no era un año donde los coches de segunda mano estuvieran especialmente caros. Si hace unos meses hablaba de la dificultad de encontrar un coche de segunda mano por menos de 10.000 euros, en aquellos días la crisis de 2008 todavía se debía notar en el mercado.
A cambio de aparcar aquel Fiat Grande Punto en nuestra casa, descontamos 5.000 euros del presupuesto familiar. Llegaba con cinco años a sus espaldas (fabricado en 2006), 37.000 kilómetros en el contador y un aspecto impecable, todo sea dicho.
De hecho, fueron sus acabados interiores los que mejor envejecieron. La goma de las puertas sí notaron el paso del tiempo, dejando tras sí el negro impoluto con el que nos llegó. En los últimos meses, el parasol se descolgó y no volvía a su posición habitual. Pero el estado del volante, de la palanca de cambios, el textil de los asientos y de los reposabrazos, así como todos los plásticos duros del salpicadero se mantuvieron en un estado general realmente bueno.
No así algunos otros detalles. Entre los menos costosos, la radio con lector de CD dijo adiós, lo que nos obligó a gastarnos 90 euros para, ya de paso, añadir una Kenwood con soporte Bluetooth para el teléfono móvil. Lo malo es que perdía los botones multifunción. El motorcillo de la ventanilla del conductor también se estropeó. Las gomas del conducto de agua del limpiaparabrisas trasero se obstruyeron y quedó inservible.
Pero no adelantemos acontecimientos, vamos a repasar partida por partida todos los gastos que nos supuso los casi 12 años y poco más de 130.000 kilómetros en los que mantuvimos nuestro coche.
La gasolina
Tenía claro que el coche lo fui utilizando de más a menos y ya tenía la sensación de que en los últimos años apenas cogía el coche. Nunca he utilizado el coche a diario para trabajar.
Durante un tiempo, coincidiendo con unas prácticas en las que tenía que recorrer todo Madrid para unir mi casa, el trabajo y la universidad, es posible que cogiera el coche una o dos veces por semana. En verano, sin tráfico, sí lo cogía a diario. Por aquel entonces, además, viajaba todos los fines de semana en verano a Extremadura.
Tiempo después, mi pareja se hizo con su propio coche y en los viajes largos empezó a imponerse el suyo que era más amplio, moderno, un poco más potente y, sobre todo, había demostrado ser más fiable. Lejos de las viajes vacacionales y sin utilizarlo para el trabajo, poco a poco el Fiat fue marcando menos y menos kilómetros. Con casi un lustro de teletrabajo a las espaldas, los últimos años apenas movía el coche.
Aprovechando que he ido guardando los resultados de la ITV, he podido comprobar por mí mismo cuántos kilómetros he hecho cada año. Una vez he sacado todas las cifras, he buscado el precio medio de la gasolina 95 en Dieselogasolina.com y he calculado cuántos litros necesite, teniendo en cuenta que el consumo medio siempre se situó en 7,9 litros/100 km.
Con estos datos he hecho un calculo aproximado del dinero que nos hemos gastado en el coche.
Año |
km realizados |
Precio litro gasolina 95 |
Gasto en euros |
---|---|---|---|
2012 |
15.000 |
1,434 |
1.699,29 |
2013 |
15.000 |
1,442 |
1.708,77 |
2014 |
15.000 |
1,394 |
1.651,89 |
2015 |
16.500 |
1,242 |
1.618,94 |
2016 |
16.500 |
1,171 |
1.526,40 |
2017 |
13.500 |
1,234 |
1.316,06 |
2018 |
9.500 |
1,301 |
976,40 |
2019 |
8.000 |
1,315 |
831,08 |
2020 |
7.000 |
1,184 |
654,75 |
2021 |
5.500 |
1,357 |
589,62 |
2022 |
5.500 |
1,802 |
782,97 |
2023 |
7.000 |
1,642 |
908,026 |
Total |
134.000 |
14.264,20 |
ITV, seguros e impuestos
Evidentemente, la gasolina ha sido una de las partidas que más dinero se ha llevado en el gasto que hemos hecho a lo largo de los casi 12 años que el coche estuvo con nosotros. Pero los impuestos, el seguro y la ITV no han sido baratos precisamente.
Empezando por la partida menos costosa, el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica se ha movido en Madrid, para mi coche, entre los 66 y los 59 euros desde 2012. Eso sí, desde 2015 he pagado invariablemente la misma cantidad de 59 euros. En los años que hemos tenido el coche, hemos desembolsado 726 euros.
La ITV tampoco ha sido un gasto desdeñable si vamos sumando y sumando años. En Madrid son empresas privadas las que se encargan de esta revisión anual por lo que se pueden rescatar algunos euros si se busca bien. Yo, personalmente, he pagado entre 38 y 34,55 euros todos los años, pues pasaba la ITV cerca de mi casa y no me convencía ahorrarme unos pocos euros si tenía que desplazarme más lejos.
Salvo el último año, que pasé la ITV en Extremadura y allí es de gestión pública, lo que me supuso un coste de 25 euros, sensiblemente inferior a las de Madrid, el gasto ha sido casi el mismo. En total, he desembolsado 339,26 euros en 10 exámenes de la ITV pues hasta el año 2016 no tuve la obligación de pasarla año a año.
El seguro sí fue mucho más costoso. Entre 2012 y 2018 pagamos un seguro a todo riesgo que se movió entre los 770 y los 887 euros. Ya en 2019 pasamos el seguro a un todo riesgo con franquicia de 200 euros que, además, solo pagamos en una ocasión, como veremos más adelante. Entonces, el coste del seguro pasó a ser cada año de 375 euros. En total, durante 12 años de seguro nos dejamos 7.615 euros. Es la segunda partida de mayor coste.
Revisiones
Si hubiera seguido el libro de mantenimiento al dedillo, lo cierto es que Fiat da un periodo de 30.000 kilómetros entre revisión y revisión para el mantenimiento. Yo, sin embargo, preferí pasar el mantenimiento del coche cada 15.000 kilómetros más o menos. Además, de haberlo estirado en los últimos años a esos 30.000 kilómetros habría pasado cuatro o cinco años sin pasarle una revisión al coche.
En las revisiones del coche le hacía, generalmente, lo básico: cambio de filtros, aceite y comprobaciones varias. Por norma general, la mayoría se mantuvieron alrededor de los 250 euros. Pero hay tres revisiones que tengo grabadas en el corazón y en la cartera como un puñal, pues se disparó el coste.
En el año 2016, con 100.000 kilómetros, se sumó un cambio de neumáticos y de amortiguadores. Puede parecer que fuera muy pronto para esto último pero lo cierto es que el coche mejoró sensiblemente el comportamiento y el confort. El coste fue de algo más de 1.000 euros.
Con unos 130.000 kilómetros, en 2018, el vaso de expansión dijo basta y el aceite nunca cogía la temperatura deseada pues abría demasiado pronto. Si le sumamos que estábamos en invierno, no quedó más remedio que cambiarlo. La factura se excedió un poco y subió casi a los 350 euros.
Por último, con unos 150.000 kilómetros, ya en 2020, el coche dio varios problemas y para olvidar todo, aproveché la revisión para cambiar varios elementos. El motor de arranque había dejado de funcionar y hubo que sustituirlo, el embrague también pedía un cambio (demasiada ciudad por aquel entonces) y el soporte del motor hubo que reajustarlo para reducir las vibraciones. Coste: 980 euros.
Km |
Coste en euros |
---|---|
50.000 |
257,46 |
65.000 |
257,46 |
80.000 |
257,46 |
100.000 |
1.081,30 |
120.000 |
257,46 |
135.000 |
346,57 |
150.000 |
980,69 |
1655.000 |
223,86 |
Total |
3.662,26 |
Reparaciones y mantenimiento
Llegamos a la última partida, otra de esas que hacen daño y que durante un tiempo me hizo plantearme muy seriamente vender el coche. Ahora, con las cuentas delante me pregunto si hice bien en mantener mi Fiat Grande Punto conmigo y la respuesta, aunque la conozco de sobra, no quiero reconocerla.
En esta partida hay gastos lógicos de manteniemitno, como un cambio de neumáticos, sustitución de luces (que en este coche se las traía y ya adelanto que yo solo no podía haberlo hecho porque estaba realmente escondido y era muy incómodo), la sustitución de alguna batería, frenos de disco o la sustitución de la correa de distribución.
Dicho esto, paso a enumerar todos los problemas más o menos graves que dio el coche durante el tiempo que lo tuvimos con nosotros:
- Rotura de la dirección asistida: efectivamente, estos coches daban problema con al dirección asistida “gracias” a su modo City que ponía la dirección tan blanda que se podía mover con un solo dedo y tenía un recorrido larguísimo. Apenas la utilicé un par de veces como mera curiosidad (no sé quién podía utilizar aquello). Coste: 2.000 euros.
- Termostato: además del vaso de expansión (reflejada en una de las revisiones) también se estropeó el termostato. Coste: 185,86 euros.
- Motor de arranque: sí, aunque lo he reflejado en una revisión, no me estoy equivocando. Se rompieron dos motores de arranque. Coste: 491,26 euros.
- Fallo en el cable de la palanca de cambios: rompió en un viaje a Lisboa y me quedé, en la práctica, sin caja de cambios pues solo podía meter primera. Coste: 192,35 euros.
- Rotura en el motor de la ventanilla del condutor: para lo que hubo que desmontar toda la puerta. Coste: 200 euros.
- Radio: la ya mencionada sustitución de la radio. Coste: 90 euros.
- Soporte motor: el coche necesitó cambiar el soporte motor y apuntalarlo en varias ocasiones. Coste: de 51,43 (apuntalar) a 196,41 (ponerlo nuevo).
- Franquicia seguro: tuve un pequeño golpe con el coche sin graves consecuencias pero que, por mala suerte porque iba ya despacio, partió por completo la columna de la dirección. Coste: 200 euros.
- Carga del aire acondicionado: nos quedamos sin aire el último verano con el coche porque se fue la carga del gas del aire acondicionado. Coste: 80 euros
- Tapón del depósito: vivo en mi propio mundo y salí de una gasolinera con el tapón del depósito de combustible en el techo. Quizás todavía esté rondando por algún lugar de la A-5. Coste: 37,40 euros.
Con todo, las visitas al taller quedan del siguiente modo:
Motivo de la visita al taller |
coste en euros |
---|---|
Carga aire acondicionado |
80 |
ROTURA DIRECCIÓN ASISTIDA |
2000 |
TAPÓN DEPÓSITO COCHE |
37,40 |
CAMBIO NEUMÁTICOS Y LÁMPARAS |
317,40 |
SUSTITUCIÓN TERMOSTATO POR AVISO DE FALLO MOTOR |
185,86 |
APUNTALAR EL SOPORTE MOTOR |
51,43 |
SUSTITUCIÓN LUCES DE FRENO Y REPARACIÓN LIMPIA TRASERO |
84,78 |
SUSTITUCIÓN MOTOR DE ARRANQUE |
491,26 |
SUSTITUCIÓN DE BATERÍA |
121,30 |
FALLO EN EL CABLE DE LA PALANCA DE CAMBIOS |
192,35 |
franquicia |
200 |
CAMBIO correa DE DISTRIBUCIÓN |
600 |
avería ventanilla conductor |
200 |
radio |
90 |
discos y pastillas de freno |
263,72 |
SOPORTE MOTOR |
196,41 |
Total |
5.111,91 |
Coste total de tener el coche en propiedad
Una vez comprobamos que tenemos la calculadora echando humo, pasamos a hacer un recuento de cuánto dinero nos hemos gastado en el coche a lo largo de todos estos años.
gasto |
coste en euros |
---|---|
Compra coche |
5.000 |
REVISIONES |
3.662 |
GASOLINA |
14.264 |
SEGURO |
7.615 |
TALLER |
5.112 |
IMPUESTOS |
726 |
ITV |
339 |
Total |
36.719 € |
¿Caro o barato? Aquí, cada uno dirá, dependiendo de numerosas variables. Habrá quien considere que 36.719 euros gastados en casi 12 años les puede parecer mucho dinero. Otros pensarán que no tanto y otros harán notar que el coche, un Fiat Grande Punto, no debería haber supuesto tanto coste.
Habrá quien se dije en los kilómetros recorridos (134.000) y pensará que no son muchos kilómetros para un vehículo que se ha mantenido durante más de una década. Es probable que haya quien haga 25.000 kilómetros al año y le parezcan muy pocos y otros que 10.000 kilómetros anuales esté en sintonía con lo que realizan.
Para aportar algo más de luz y que cada uno pueda tener sus propias cuentas, dejo unos últimos datos:
- Coste por kilómetro: 0,2740 euros/km
- Coste por mes (141 meses): 260,42 euros/mes
Como última reflexión diré que, de haber echado estas cuentas antes y desde un punto de vista puramente racional, probablemente habría vendido antes el coche. Pero también es cierto que no me escuece el dinero gastado y que, también es cierto, si no vendí antes el coche fue porque me empeñé en mantenerlo por puro cariño.
No lo necesitaba realmente pero, en el fondo, siempre miraba con miedo el día de decirle adiós. Ojalá el nuevo dueño sepa apreciarlo tanto como yo lo aprecié.
Imagen | Xataka
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